¿Ni su viejita canta su canción?: Conoce a La Nueva Invasión

En una época en la ke un gran número de jóvenes dedica sus mejores años y esfuerzos a mantenerse inconscientes respecto a la sociedad en la ke viven, escuchar voces e ideas como las del cantante de La Nueva Invasión resulta estimulante y esperanzador. La entrevista con Luis Antonio Vicente Farromeque, planteada como insumo para una nota publicada en el número 300 del suplemento Variedades del diario El Peruano, terminó siendo una declaración de principios, además de una detallada presentación de la historia y el ‘rollo’ de una de las bandas más sorprendentes de la escena juvenil alternativa actual. Por todo eso es ke rescatamos la versión completa de tan interesante conversación.

¿La propuesta de La Nueva Invasión trasciende lo musical, como, por ejemplo, La Sarita, ke en sus entrevistas habla de “interculturalidad” y cosas por el estilo?

La propuesta como concepto está en construcción, encontrando poco a poco su forma, su voz. En este momento a través de nuestro trabajo manifestamos un montón de cosas ke sentimos pero ke no podemos racionalizar en palabras. Creo ke eso es un común denominador en cierto tipo de jóvenes peruanos ahorita. Es como un impulso para trabajar ciertas cosas, como ciertos ritmos tradicionales, ciertas temáticas; pero son impulsos más emotivos ke racionales.

¿Falta mucho para definir eso?

Somos conscientes ke necesitamos en algún momento aterrizar todas esas cosas en un concepto claro. De hecho está el tema de la interculturalidad y el de la reivindicación, pero más que eso está la reinvención de cierta sonoridad, darle continuidad  a ciertas propuestas y la interdisciplinaridad, porke trabajamos con otros colectivos de artistas, con gente ke hace danza o intervenciones en murales… En resumen, creemos ke el arte puede ser una herramienta de transformación social y personal.

¿Por ké elegir la música para lograr eso y no otra manifestación artística?

Cuando era niño tenía la firme convicción de ke kería ser actor. Incluso participé en algunas obras. Luego pensé en ser escritor, pero la fuerza y el impacto que produjo en mi ver a las bandas subterráneas de punk de finales de los 90 pudo más ke otras expresiones artísticas. Por ellas fue ke kise subir a un escenario y decir lo ke kiero decir de esta manera. De eso salió Suicidas.

En el aspecto musical, la propuesta del grupo está más definida, y va por el lado de la mezcla y la fusión, ¿verdad?

La Nueva Invasión tiene cuatro grandes bases musicales: la cumbia, la chicha, la guaracha y el son, y el rock. A diferencia de grupos como La Sarita y Los Mojarras, ke salpican el rock con chicha y cumbia, nosotros salpicamos la cumbia, la chicha y la guaracha con el rock.

¿Por ké mencionas la guaracha, ke es un estilo más antiguo y clásico de la música de raíz cubana, y no la salsa, ke es más reciente y popular aquí?

Es ke la salsa es muy difícil y no keremos faltarle el respeto diciendo ke la tocamos. En un comienzo kisimos hacerlo, pero lo ke nos sale en realidad es son y guaracha. A todos en la banda nos encanta la salsa. En cuanto a conchudez es muy similar al rock and roll, por el lenguaje con ke se dicen las cosas, en especial en la salsa dura y antigua. Nos encanta, pero no tenemos teclado ni el rigor musical como para trabajarla como se debe. Kizás a futuro podemos jugar con temas completamente salseros, pero ahora lo hacemos con el son y la guaracha, ya ke los tenemos cerca. Aparte, yo y Diego Vicente (su hermano y guitarrista del grupo) somos recontra fans de Los Compadres y de los sones guaracheros antiguos ke escuchábamos cuando vivíamos en El Agustino. Por eso siempre jugueteamos con esos ritmos.

Luis Antonio : Voz, composición y baile.



Diego,  guitarra de LNI.

Me parece bacán ke esos punteos guaracheros al estilo de Los Compadres, de algunas canciones del grupo los hagan con charango.

Es ke el charango es un instrumento guaracherazo. Con nosotros se libra de ciertos “debe ser”. Hay gente ke cree ke el charango debe sonar andino y ke la kena debe sonar ancestral, mística y telúrica. Lo loco akí es que esos instrumentos se están liberando de ello. Ahora le estamos pidiendo a Aurelio Castillo (charanguista de la banda) ke le meta un efecto al charango. Es algo ke no se ha hecho: meterle un wah wah, un delay, un fuzz. Sería locazo. Es un instrumento ke no se ha explotado en su totalidad.

Bueno, de hecho ke una de las cosas ke más llama la atención de La Nueva Invasión es ke utilicen instrumentos andinos en ritmos de base tropical

Me parece increíble ke la banda tenga como distintivo un charango que toca criollo y luego guaracha, o una kena que toca amazónico, andino y son, acompañando al rock. En eso influye harto la presencia de integrantes como Aurelio y Fernando Castro (encargado de las kenas y flautas) ke son músicos de la calle. Ellos han viajado por diferentes países mochileando. En cierta medida, la música era una necesidad para su supervivencia, y eso también aporta cierta frescura a la hora de tocar sus instrumentos, y cierta versatilidad, porke no tienen el fundamentalismo de otros kenistas o charanguistas de escuela o miembros de alguna agrupación folclórica en donde indudablemente el peso de la tradición es más fuerte. Su formación musical ha sido más libre y juguetona. Por eso pueden romper un poco con ese sonido tradicional andino.

Hablando de puristas, ¿se han encontrado con alguno ke los critique por las mezclas ke hacen?
Si, pero es más la gente ke nos pide ke metamos más cosas. Por ejemplo, en Puno un pata nos decía ke le metiésemos más música electrónica. Pero también hay gente purista en cuanto al contenido, ke quiere apropiarse del discurso de La Nueva Invasión.  En un conversatorio en la UNMSM con gente de La Sarita, Del Pueblo y Los Mojarras, apareció uno. A mi me tocó defender lo ke hacemos y dije ke el Perú al ke tenía ke enfrentarse ‘Cachuca’, Piero Bustos y el ‘Negro’ Acosta ha cambiado, ke nosotros no podíamos enfrentarnos a ese mismo país y ke no estábamos tratando de reivindicar algo diciendo ke eso si es el Perú y ke lo otro no lo es. Lo ke hacemos es tratar de buscar nuestro camino y cantarle a un país ke cada vez es más pluricultural.

¿Y ké fue lo ke les cuestionaron?

Pese a lo ke ya se había dicho, alguien dijo ke debíamos tener más “conciencia de clase”. Es gente que quiere incorporar sus “debe ser” a la banda y proyectar las reivindicaciones ke ellos kieren hacer, en otros espacios, en los músicos. Hay mucha gente así; gente ke puede pensar ke nos vendemos porke por ejemplo hemos decidido invertir en los servicios de una empresa de medios para ke nos ayude a difundir nuestro material. ¿Por ké cerrarnos a eso? La esencia no te la va a kitar nadie.

Bueno, lo de la conciencia social yo lo noto en todas las letras y hasta en la música. Está muy claro de dónde es ke ustedes provienen…

Y también cómo vivimos. La conciencia de clase te acompaña desde ke te levantas hasta ke te duermes. Pero cuando ella se vuelve un “debe ser” en tu arte, tu banda empieza a hacer panfletos, y esa no es nuestra intención; para nada.

En las letras ke has compuesto en el disco describes cosas y situaciones, evitando lanzar juicios de valor

Es como en la literatura. Escritores norteamericanos como Ernest Hemingway o William Faulkner cuentan hechos, acciones. No te dicen lo ke tienes ke sentir. Tú lo descubres tras interpretar lo ke has leído. Acá también tenemos gente ke hace eso en la música, como Rafo Ráez o Daniel F.


De suicidas a invasores

Aurelio, charango.

Fernando: fundador.

La Nueva Invasión se asentó sobre los cimientos colocados por Suicidas, el trío rocanrolero de tendencia punk formado por Luis Antonio, su hermano Diego y José Vargas; pero su ADN puede rastrearse en los mismos orígenes de la contracultura rockera y literaria limeña en la cual se han inspirado, al haber sido su madre y su padre partícipes de esta desde las trincheras de la recordada Nave de los Prófugos, ubicada en las escalinatas de la Universidad Villareal, y la librería El Transparente Criminal del jirón Killca. Hablar sobre todo ello daría para otra larga entrevista, supongo. Prefiero por eso resumir las cosas haciendo la típica pregunta cliché.  

¿Cómo es ke se formó La Nueva Invasión?

Se formó sobre la base de dos inquietudes similares. Por un lado estaba la base de Suicidas: Diego, José ‘Cubano’ (baterista del grupo) y yo, ke sentíamos ke musicalmente nos estábamos aburriendo con lo ke estábamos trabajando. Veníamos tocando los diez u once temas ke teníamos pero sentíamos la necesidad de variar, experimentar otros sonidos, y jugar con otras reacciones del público.

¿Ké reacción querían generar?

Es bacán que la gente baile, poguee o se empuje, pero nosotros también disfrutamos de otras expresiones catárticas en la música. Por ejemplo, nos gusta bailar y cantar tanto como nos gusta poguear, y tratamos de transmitir esas emociones al público. Por eso empezamos a mezclar otros ritmos, y los ke nos salían fácilmente eran la chicha y la cumbia. Entonces empezamos a jugar a mezclar un pokito estas con el punk de Suicidas, pero musicalmente nos faltaban juguetes, una producción y una base para la guitarra, para ke esta pueda volar.

José Vargas "Cubano"

Mencionaste ke hubo dos inkietudes sobre las ke se formó el grupo. ¿Cuál fue la segunda?

Yo venía trabajando con Fernando organizando eventos con bandas como La Mente o Chapillacs, dentro de esta movida más tropicalona ke venía surgiendo, pero como organizadores sentíamos ke había un vacío de contenido en las bandas, un vacío en lo ke se refiere a la postura en el escenario. Era como si todo fuese muy lineal y light.

¿Cuándo percibieron ese vacío?

Desde cuando empecé a frecuentar esos conciertos y desde ke empecé a organizarlos… No había kien llenara eso. Probablemente pudo hacerlo La Sarita, pero se distanciaron  de la nueva camada de bandas. Pero además estas no hablaban de algo más significativo. Los Chapillacs eran casi instrumentales. Barrio Calavera no tenía una posición muy clara: No se sabe si kieren o no ser pachangosos. Y tenías a La Mente, ke para ese entonces lanzaban mensaje medio extraños, aunke en su segundo disco empezaron a abordar cosas más directas. Entonces me di cuenta de ke si no iba a haber una banda como la ke yo kería escuchar, tendría ke formarla. Por otro lado, Fernando y Aurelio sentían lo mismo. Nuestras dos inquietudes se juntaron y dieron pie a pequeños ensayos en 2009.

Pero en esa época Suicidas seguía tocando

Pero era algo distinto. Una banda ke formas cuando tienes 17 años tiene otra carga de experiencias, de vida, de inquietudes, y tocar estas nuevas canciones como Suicidas podría haber sido igual ke alargar una etapa ke de repente teníamos ke mutar. Al final éramos los mismos músicos, pero Diego y yo sentíamos ke Suicidas tenía mucha carga adolescente. Entonces buscamos trabajar con gente nueva, ke tuviese la inquietud de proponer y ayudar un poco más a mover una banda, ke es algo que implica chamba mental, tiempo y plata, y ke era algo ke hasta ese momento en Suicidas estaba yo haciéndola solo. Por eso kería reinventar esto, jugar un poco más, experimentar.

¿Tan difícil era darle a Suicidas un nuevo perfil?

En un par de conciertos seguimos el plan de mantenernos como Suicidas, pero con más integrantes, pero sentía ke no era justo para ellos sumarse a un proyecto ke yo había imaginado y cargar el peso, la historia y el espíritu de este. Sentí ke no había ke negarles la oportunidad de construir algo nuevo desde cero y de darle su propio espíritu. Creía ke esa era la manera de ke la banda iba a funcionar mejor, y fue una decisión estratégica.

Parece ke desde el comienzo La Nueva Invasión fue un ‘manchón’

Debutamos con seis músicos y luego se sumó a nosotros el chino Francis Toykin (percusionista). Lo conocí en la universidad. Nunca lo había escuchado tocar. Lo sumé porke era un buen amigo. Cuando conversaba con él compartía inquietudes similares a las de kienes estábamos formando el grupo. Y fue un jale importantísimo porke él aprendió a tocar con La Nueva Invasión.

El ke no sabía tocar

¿Convocaste a alguien ke no sabía tocar?

Antes tocaba algo. Tenía unos bongoes chiquitos… En este caso apliké una cosa ke me dijo un músico viejo: “de una buena persona puedes hacer un buen músico, pero de un buen músico no puedes hacer una buena persona”. Además, era el momento de arriesgar. Ni sikiera teníamos nombre.

¿En ké radicó la importancia de reclutar a Francis?

Sumó a la unidad de la banda, al espíritu, a constituirse como una familia, porque ahora funcionamos como eso. Somos muy cercanos todos. Hay una situación de aprecio y cariño entre todos. Sirvió. Fue como armar un rompecabezas. Él encajó muy bien.

¡Cumbia, por la RCSM!

Los efectos ke el alcohol tiene sobre las neuronas son seguramente los ke impiden ke recuerde cuándo fue ke vi por primera vez a La Nueva Invasión en vivo. De akella ocasión keda, nebulosa pero firme, esa sensación de sorpresa ke se ha reeditado en los conciertos ke les he visto con posterioridad. Contribuyen a ella, pienso, la frescura (conchudez también podría llamarse) con la ke hacen interactuar instrumentos musicales de diversa procedencia, pero también la manera en la ke su frontman establece comunicación con el público y un puñado de canciones con letras significativas y coros ke propician el acto catártico de cantar a voz en cuello. Ke no sorprenda pues ke en su cada vez más numeroso sékito de seguidores hayan hipsters, intelectuales radicalizados y hasta algún viceministro de Estado.

¿Cuándo tocaron por primera vez?

Creo ke debutamos en El Agustino, pero todavía como Suicidas. Fue en un evento organizado por la municipalidad en el ke también tocó La Sarita. Era un concierto benéfico. Luego cambiamos el nombre a Guanarpo Macho y así tocamos en la Universidad Agraria, en un evento ke organizó José cuando todavía estaba como dirigente allí. Debutamos como Guanarpo Macho. Antes de decidirnos por La Nueva Invasión tuvimos una lista de 50 nombres. Ya con este nombre debutamos el 31 de octubre de 2010 en un concierto ke organizó una flaquita por Halloween. Decidimos el nombre por teléfono. Ese día fue locazo porke tocamos dos veces, primero tempranito y cuando terminó el concierto volvimos a subirnos al escenario para seguir porke nos kedamos con todas las ganas de tocar. La gente estaba en fiesta y había muchas más personas ke cuando tocamos temprano.

¿El nombre lo decidieron por teléfono, dices? Eso es raro, porke la frase La Nueva Invasión puede tener muchísimas lecturas

Pensamos en los puntos en común ke teníamos. Somos tercera generación de migrantes todos casi; nietos de gente ke no tuvo educación superior y ke trabajó toda su vida. Somos una generación de migrantes ke se apoderó de la ciudad, ke estudia, ke tiene chamba política, ke reclama ser protagonista de la construcción del país con armas como la educación y el arte. Por eso salió el nombre. El concepto de Perú surge de una invasión, ke es la de los españoles. Luego el país se empieza a reinventar en base a una segunda invasión ke es la del campo a la ciudad. Ahora hay una nueva invasión ke surge en la ciudad y ke pretende expandirse a otros campos con una postura ante la vida ke implica trabajo y plantearse el Perú como un nuevo país ke tiene ke empezar a reconciliarse con su pasado, sin complejos, sin resentimiento.

Pero los resentimientos y complejos han estado presentes en nuestra escena musical
Sí. Esa automarginación marcó un culo la música subte de los 80, y dejó ese conflicto de lo comercial y lo no comercial, de si te vendes o no al sistema, ke hasta ahorita perdura, pero ke en realidad es algo ke a nosotros no nos quita el sueño.

Hablando de esas dicotomías, me parece alucinante ke ustedes convoken a sus conciertos (ke mal ke bien, atraen a un público rockero) a un grupo de música y formato tradicional como la Banda Show Nueva Expresión Musical Yauyos, y más alucinante aún es ke la gente los acoja con tanto entusiasmo.

Ese rollo de apertura lo tenemos muchos jóvenes ahora. Lo cierto es ke tenemos mucho público ke son jóvenes profesionales. Gente de San Marcos, de la Católica, de la San Ignacio, del IPP, ke desde muy temprana edad es parte del sistema pero ke de una u otra manera kiere ke su chamba, su energía, su cerebro y su tiempo sirvan para construir algo más; para cambiar de alguna manera esta idea de país ke tenemos. Por eso se identifican con La Nueva Invasión y con ese tipo de música.

¿Y también has visto en el público del grupo a esa gente sobre la que cantas, de los marginales?

Si hay respuesta de ellos también. Hay algo ke nos pasa casi siempre cuando tocamos en discotecas como Voce, San Bartolo, Help, El Sargento Pimienta, o el Toro Bar: hacemos nuestra prueba de sonido, nos escucha el cantinero, el de seguridad y las chicas ke cobran en la puerta, y cuando salimos después, ellos, los empleados, nos preguntan cómo se llama el grupo, nos dicen ke está bacán y piden ke les vendamos un disco. Hay una identificación. Les gustamos a ellos y eso es bueno. Como decía Charles Bukowski sobre la literatura: si lo ke haces le gusta al obrero ke trabaja doce horas al día es ke tiene algo bueno. Eso nos alegra porke creemos ke es difícil captar a ese público. Es difícil ke se identifike con nosotros alguien ke no está acostumbrado a escuchar cosas como las ke hacemos.

De hecho es más fácil llegar al público acostumbrado al rock nacional y también a los artys y hipsters que a ese otro sector, ¿no?

Sí, pues. Con nosotros hay una empatía bien emotiva. Fuimos al festival Selvamonos en Oxampampa este año y también fueron un montón de universitarios. Cuando terminamos bajé del escenario y uno me dice ke cuando tocamos “es como cuando juega Perú”. Me pareció locazo eso. Kiere decir ke hay gente ke se identifica con nosotros y ke kiere ke nos vaya bien.

Parece ke ese festival fue muy importante. Llamaron la atención de cierta prensa masiva con su participación allí.

Selvamonos fue muy importante. Fue una ventana. Nunca habíamos tocado para cuatro mil personas. La gente no se esperaba a un grupo como La Nueva Invasión. Esperaban a Uchpa y lo ke ellos hacen desde hace un montón de tiempo. También a los Cumbia All Stars, ke hacen las canciones hit de la cumbia peruana, pero no esperaban algo como nosotros, con nuestras visuales, vestuario y un show ke mezcla la frescura del punk con el sabor de lo tropical. Fue muy bueno. A partir de ese momento creció la aceptación de la banda en otros públicos y sectores.

¿Ké otros hitos identificas en la historia de La Nueva Invasión?

La gira ke hicimos ahora y en la ke filmamos el vídeo de ‘Serpiente Dios’, y el lanzamiento del disco.

'Serpiente Dios' de LNI: ¿El mejor Videoclip nacional del año 2012?

Han ido a Bolivia dos veces. ¿Encontraron grupos similares a ustedes allá?

No. Es mucho más trankila Bolivia. Escuchamos a la banda representativa de allá: Atajo, ke son casi tan antiguos como La Sarita. Pero su música es más ‘tranki’. Su fusión es más tradicional, más rock, con santiagos y música andina. Es un poco menos diversa. Pero no encontramos bandas jóvenes. No hay mucha renovación allá, parece.

¿Y cómo fue ke pudieron tocar en La Paz?

Esta última vez fuimos para reforzar el vínculo con Diego, propietario del bar Target Urbano, ke nos recibe con mucho cariño allí, en el barrio de Sopocachi. Es una mezcla entre El Averno y El Sargento Pimienta. Más ke una discoteca, se acerca a lo ke es un centro cultural. El año pasado al llegar allí no teníamos ni un sol para regresar. Incluso tuvimos disputas sobre por ké estábamos yendo allá. Es ke teníamos el compromiso y, pese a ke podía debilitarse la unidad del grupo, fuimos. Hicimos más plata en ese local ke lo que hicimos en otros lugares. Y fue en una sola noche. Este año regresamos en una fecha complicada e hicimos menos plata, pero sirvió, porke nos ganamos con las fiestas patrias de Bolivia, ke incluimos en el vídeo de ‘Serpiente Dios’... Mi plan era ir hasta Ikike, en Chile. Tenía allá una fecha, pero eso era exigirle mucho a la banda.

Ha de ser difícil manejar ese tipo de cosas cuando en el grupo hay gente ke vive de la música y no toma esto como un hobby o como una segunda ocupación.

Sí. Soy consciente ke muchas veces exigimos a los integrantes vivir al límite. Salimos con lo justo para los pasajes, y el resto de la plata tienes ke hacerla en la calle, tocando. Hay momentos en ke ciertos integrantes tienen mejores momentos económicos ke otros y eso compensa. Felizmente nunca nos ha agarrado la crisis a todos porke eso haría insostenible al grupo. Lo ke buscamos ahora es consolidar un poco más a la banda con un proyecto ke permita generar los medios para chambear tranquilos sin exigir tanto a los integrantes. Es ke keremos seguir viajando. Ese es un distintivo del grupo. Ya hicimos el sur del país y ahora nos toca el norte y salir a otros países, como Chile, Argentina, Ecuador y Colombia. Keremos probar también suerte en Brasil, pero eso requiere primero planteártelo y ver si hay ke hacer previos y chambear.

Para eso tienen ke tener una estrategia bien planteada
Sí, porke los integrantes del grupo trabajan y otros estudian y trabajan.

Gonzalo, el aeropajita.

¿Tú eres kien se encarga de eso?

Se ha ido rotando esa chamba entre Fernando y yo, los fundadores, y ahora ke ha entrado Gonzalo Lissia (percusionista), se ha convertido en un apoyo increíble, porque ese compadre no juega con la música. Él es uno de los pocos músicos de escuela ke tenemos, junto con Rafael Ávalos (bajista). Él vive de la música y crea escena. No está en los proyectos en ke está (Aeropajitas, Los Mortero) solo por divertirse. Cree sinceramente en ke estos pueden funcionar y ser medios de desarrollo musical y personal. Entonces ahorita estamos  trabajando fuerte con él. Es un apoyo guía para kienes no pueden dedicarle kizás mucho tiempo a la banda por razones de trabajo; pero su opinión y visión es importante.

Oye, ¡pisa hasta el fondo!

Hace poco más de un año, en medio de una entrevista-almuerzo en El Agustino, Hernán ‘Cachuca’ Condori rociaba flores sobre La Nueva Invasión, diciéndome ke por su estilo y por continuar de alguna manera el trabajo musical ke él había hecho, era el nuevo grupo ke más le gustaba. Los lazos de esta joven banda con Los Mojarras y, en general, con la fusión entre el rock y la chicha, son bastante fuertes y están muy presentes en varios tracks de su primer CD, el hoy agotado Súbele a la Radio. Estos también transmiten una frescura y un desparpajo ke ya kisieran para sí varias de las bandas de fusión punteras de nuestra escena. Un trabajo algo más cuidadoso en cuestión de ejecución instrumental y despliegue escénico pondría a La Nueva Invasión al frente de dicho pelotón, sin reparar en pergaminos ni jerarkías. Ello será tan solo una cuestión de tiempo y de concretar los planes ke Luis Antonio akí detalla.

¿Con ké grupos se sienten hermanados?

En Argentina sí hay muchos grupos similares a La Nueva Invasión. En Colombia y Chile también. Esta cuestión es un fenómeno latinoamericano. No somos una isla. Latinoamérica se mira más a sí misma y a su historia musical. Grupos como Los Fabulosos Cadillacs construyeron su historia mirando hacia afuera porque no había mucho ke mirar hacia adentro. Nosotros y grupos como Arnarkía Tropikal de Chile, Orquesta Zambomba, de Argentina, y Barrio Calavera, de akí, somos bandas ke miramos a nuestra historia, a kienes estuvieron antes ke nosotros akí. Podemos hablar de un pasado musical propio y cercano. Ese es un proceso natural. Vas descubriendo más ritmos que existían en tu tierra y ke no sabías ke existían, y puedes incorporarlos a tu sonido, ke al final es tu voz.

¿Ké referentes tienes cuando compones tus canciones?

En general, Leusemia.

No se parece mucho a cómo suena La Nueva Invasión

Sí, pero es un referente constante y Eutanasia también. Rafo Ráez lo es en las letras, en buscar melodías, en tratar de ke tu voz no se pierda en la voz colectiva. Daniel F también tiene eso bien marcado. Chacalón es otro referente fuerte. Su caso es bien loco, porque  si bien Los Shapis hacían música para los obreros, él la hacía para los lumpen, y a nosotros nos gustan ambos. Nuestra música tiene de ambos, y también de Los Mojarras. Con 'Cachuca' siempre ha habido cercanía. De él se aprende lo ke hay ke hacer y lo ke no hay ke hacer. La Mente también es un referente en cuanto al trabajo, a su profesionalismo, a su constancia y creatividad. No hay muchos como ellos aquí.

Lo ke veo en ellos es una proyección de su trabajo ke va más allá de lo musical

Si. Eso es importantísimo. Nosotros tratamos de aplicar eso en la banda. Por ejemplo, esta última gira ha sido recontra estratégica en cuanto a marketing. Ya habíamos ido el año pasado por esas mismas ciudades y lo lógico es ke, como una inversión, uno siga cultivándola. Si uno deja de ir a esos lugares dos años, se enfría la cuestión. Si sigues yendo generas una continuidad en cuanto a público y espacios. Había una parte de la banda ke kería irse a otro lado, para variar. Pero eso podía esperar un poco más. Lo ke hicimos fue defender una inversión, sino la gira del año pasado hubiese sido solo una anécdota. Además, se aprovechó para grabar el video de ‘Serpiente Dios’ ke pedía ambiente rural a gritos. No era lo mismo hacerlo en Lima

Me parece ke esa canción resume en letra y música lo ke es el grupo.

Fue el primer tema que hicimos y hasta ahora no hemos podido sacar uno igual. No lo hemos intentado tampoco. Está hecho en ritmo afroperuano. La base rítmica es igual ke la del festejo.

Tú la compusiste. En el disco solo hay unas cuantas compuestas por otros.

Me ha tocado el papel de compositor principal, pero espero ke eso cambie a futuro porke ello renovará el trabajo de la banda.

"Camina con orgullo".

La forma en ke se dicen las cosas en tus canciones es muy directa. Además, me llama la atención como apelas a coros ke en los conciertos tienden a generar afinidad con la audiencia

Con pocos elementos puedes construir empatía con el público. Rafo Ráez, Daniel F. o 'Cachuca' trabajan con cosas simples.

Son gente ke ha establecido vínculos directos entre sus canciones y su audiencia; ke han generado identificación con ella

Claro. También han generado eso en cuanto al manejo del público, con su forma de pararse sobre un escenario. Eso es importantísimo para el público peruano. Este puede apreciar una voz hermosa, a un gran cantante, pero también mira como lo enfrentas. Una cosa es pararse con tu supervoz y cantar hermoso y otra pararte con actitud, ke es lo que tienen estos patas, ke no tienen la gran voz. Ninguno es Juan Diego Florez.

La canción “Cuídate del tombo’ me recuerda al ‘Sucio policía’ de Narcosis, por el tema ke aborda, aunque esta tiene un ritmo salsero. Pero, ¿no crees ke también incurre en la generalización respecto al comportamiento de ciertos policías?

Sí, pues. No la tocamos mucho por eso. Pero nos la piden harto

¡Es que es bien pegajosa!

Sabemos que no podemos meter a todos en el mismo saco. Como tocamos en diferentes espacios y para diferentes públicos, decidimos no tocarla tanto... De repente debió kedar sin grabarse, pero salió y hay mucha gente a la ke le gusta.

Call the cops!

Bueno, pero igual refleja una manera de pensar, una opinión, y eso es válido

Es ke fue hecha en una coyuntura bien jodida. Nuestro charanguista había sido objeto de un abuso de autoridad… También pasaba entonces el problema con las marchas en las ke la gente se iba detenida. Todos en la banda hemos sufrido abusos de este tipo y el tema salió una tarde como jugando. Fue una improvisación ke kedó porke a todos les gustó. ¡Se emocionaron con la letra!

En ‘Puerto Nuevo’, ke también es media salsera, se exalta lo marginal

Allí la música es de Aurelio y la letra de Fernando. Le puse yo un par de cosas en los guapeos, redondeando la letra. Es salsa y nos gustaría ke sonara más a eso, pero tiene más de son y guaracha.

Ensayando 'Puerto Nuevo' con una ayudita del playback.

Fácilmente ‘Las botellas’ podría convertirse en un himno para muchos de nosotros. ¿Ké lectura se le puede dar, aparte de la más inmediata?

Es la canción más 'mojarresca' ke tenemos por el coro y el punteo ke hace Diego. De lo ke habla es de cómo lo sórdido puede seducirte, atraparte y cómo puedes perderte en la noche y reivindicarte en ella, ke es algo ke pasa mucho en la juventud peruana ahora. Reivindicarte en la noche, en la perdición; construir tu identidad en base a eso.

"No te lleves las botellas, ke todos sepan cuanto llevo tomando"

Podría sonar paradójico ke pueda ir construyéndose una identidad basándose en la autodestrucción.

Es lo ke pasa con los jóvenes de mi edad ke van a los conciertos de Chacalón Jr. Y lo ke ha pasado ahorita en La Parada demuestra ke Lima es una ciudad lumpen en potencia. A la par ke crece por un lado, por otro hay gente a la ke no le interesa más ke el día a día y las emociones momentáneas; gente ke vive para ‘chupar’ en el fin de semana, gastándose 300 lucas en un ‘tono’. Por eso lo de “apilo caja sobre caja, dinero sucio, sin remordimiento” en la letra. He vivido en El Agustino y tengo muchos amigos cuya visión del mundo es reafirmarse en ese espacio, al menos durante su juventud. Y será bueno o malo, pero allí está.

Antes de terminar, cuéntame ké planes tienen

Estamos remezclando el primer disco. Queremos subirlo para descarga desde internet y también para sacar a la venta un lote más de CD, porke el primero fue en discos marca Princo no más. Ahora queremos colocarlo en tiendas y mandarlo afuera también. En realidad sacamos el disco porke ya no keríamos esperar más. Lo hicimos muy rápido. No tuvimos tiempo de detenernos en ciertos detalles, pero como ahora invertiremos más en sacarlo, limpiaremos el sonido un poco. Lo hacemos para proteger esa inversión de chamba y tiempo ke hemos hecho.

Es que un disco te sirve para mostrar tu trabajo ahora y en el futuro

Sí. Yo estoy admirado con grupos como los Olaya, Vieja Skina o Los Mortero, que sacan trabajos de calidad. Nosotros no podemos dejar de hacer lo mismo. Tenemos que sumarnos a esa fuerza ke está tratando de ganar espacios en el ‘mercado’, ke trata de darle aun más valor a nuestra música. A los músicos peruanos, sobre todo a los ke no suenan en las radios, no les kieren pagar nada. Más bien hay kienes kieren ke les paguemos vendiendo entradas para sus eventos. Hoy el valor simbólico de nuestra música está en rojo. Entonces tenemos que contribuir al trabajo ke otras bandas están haciendo de aumentar ese valor, mostrándole a esa gente una chamba de calidad; diciendo ke no somos uno sino varios los que hacemos esto.

La charla y el café van terminando –más de una hora había transcurrido- revisando cuáles son las mejores formas de proteger las tremendas composiciones del grupo frente a cualkier tropelía; pero viene a la mente la letra de su canción ‘Yo no se’, (‘y luego vienen los rateros del APDAYC y por las puras huevas te van a cobrar’) y con esta, la moraleja de ke -al igual ke con tantas otras cosas en nuestra escena independiente- hay ke buscar otras opciones alternativas (y más justas) para el resguardo de un trabajo creativo con muchísimo potencial para el futuro. Porke esta banda y su vocalista parece tener muy claro ke -no podría ser de otra manera- lo ke están haciendo va muy en serio. 

"Yo no se kienes son La Nueva Invasión / ni su viejita canta su canción".

FOTOS PSICODÉLICAS DEL GRUPO CORTESÍA DE ESTUDIO PIXÉLICA